Circular 1362-2020 Transcribimos un artículo escrito por Gerardo Hernández, publicado el 31 de agosto 2020 en “El Economista” sobre la asignatura pendiente de este gobierno, “la creación de empleos”. Print E-mail
Tuesday, 01 September 2020 11:01
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Circular 1362-2020

Transcribimos un artículo escrito por Gerardo Hernández, publicado el 31 de agosto 2020 en “El Economista” sobre la asignatura pendiente de este gobierno, “la creación de empleos”.

Creación de empleo, asignatura pendiente para el segundo informe de AMLO

El país ya acumulaba un déficit en la generación de trabajos cuando llegó la pandemia y se paralizó gran parte de la economía. En la actualidad hay 4.7% menos plazas que cuando inició la administración.

La creación de empleo ha sido la piedra en el zapato del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, coinciden especialistas. Su administración inició con una importante caída en el número de trabajos formales, lo que se repitió en diciembre pasado, generando un déficit significativo de plazas. Entonces llegó la pandemia de Covid-19, el empujón final para una caída más pronunciada.

En ese contexto López Obrador presenta su segundo informe de gobierno, con una gestión que ha puesto énfasis en mejorar las condiciones laborales, pero que ha quedado a deber en creación de nuevas plazas. Los incrementos históricos al salario mínimo, la reforma laboral, el cambio en el modelo de inspección, la flexibilidad en los fondos de ahorro y muchas otras acciones dan cuenta de la agenda laboral cargada que ha tenido el gobierno federal en turno.

Sin embargo, al cierre de julio, de acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), había 19.4 millones de empleos formales en el país, una reducción de 4.7% de lo que se registró en noviembre del 2018 cuando inició su administración.

En el 2019 nuestro país tardó nueve meses en cubrir el déficit de más de 300,000 plazas destruidas en el primer mes del sexenio. Lo poco que se logró crear fue eclipsado por el déficit al cierre del año pasado, con un diciembre que dejó un saldo de 400,000 empleos perdidos. México recibió así el 2020.

Entonces, la crisis por el nuevo coronavirus se hizo presente en el país causando estragos en el mercado laboral, con la pérdida de 1 millón 117,583 plazas entre marzo y julio.

Situación agravada por al Covid-19

La caída de la actividad económica y la pandemia han incrementado el rezago en el empleo formal. “Es claro que en el 2020 el mercado laboral ha resentido los efectos negativos de esta situación”, expone José Luis de la Cruz, director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).

El año pasado, con una caída de 0.1% del Producto Interno Bruto (PIB), nuestro país ligó varios meses con los peores resultados en generación de empleo.

“En 2019 hubo una caída de cerca de la mitad del empleo generado en 2018. Es decir, ya venía para abajo, explicado por la desaceleración económica del año pasado. En ese contexto, viene la pandemia. Con un proceso lento de empleo, se nos viene encima la pandemia y el efecto ha sido bárbaro”, explica Carlos Ramírez Fuentes, director de Desarrollo de Negocios de Integralia Consultores.

Si la tendencia del sexenio pasado se hubiese mantenido en estos meses del actual gobierno, nuestro país debería haber creado 1 millón 156,000 empleos, agrega Armando Leñero, presidente del Centro de Estudios para el Empleo Formal (CEEF).

El desafío que tiene México, coinciden los especialistas, no es sólo generar plazas para cubrir lo perdido, sino también para satisfacer la necesidad de trabajo de los jóvenes que se incorporan cada año al mercado; nuestro país necesita crear alrededor de un millón de empleos anualmente sólo para cubrir el crecimiento demográfico.

El déficit total es de 2 millones 117,000 empleos, sumando lo que se ha perdido, lo que se debió generar y lo que debe crear nuestro país, puntualiza el presidente del CEEF.

Informalidad y precarización, primer impacto

La desacelerada creación de empleo ha cobrado facturas importantes. Informalidad e ingresos más bajos han sido dos de las consecuencias más fuertes para el mercado de trabajo, afirma José Luis de la Cruz.

“Estas son dos de las facturas que se están ampliando. La informalidad, la precarización de los salarios y ahora la desocupación, son elementos que siempre han estado presentes en la economía mexicana durante los últimos 40 años”, dice el director general del IDIC.

La informalidad ha sido el refugio de las personas que no han encontrado un empleo formal debido a esta situación, acota Carlos Ramírez. “El costo es de todo tipo, hay uno social enorme, porque muchos jóvenes se están incorporando a la vida laboral y no encuentran oportunidades”, advierte.

En la última Encuesta sobre las expectativas de los especialistas en economía del sector privadorealizada por el Banco de México, los analistas estiman, en promedio, que el 2020 cerrará con una pérdida de 1 millón 173,000 puestos de trabajo registrados ante el IMSS.

Mientras tanto, el presidente López Obrador ha mantenido viva su promesa: crear 2 millones de empleos este año. Estas plazas serán resultado de contrataciones en el gobierno, programas prioritarios y de infraestructura. En proyectos emblemáticos, como la refinería de Dos Bocas, Tabasco, y la construcción del Tren Maya, espera generar 150,000 trabajos directos en lo que resta del 2020, informó el Primer Mandatario este domingo.

Anuncio el presidente en su informe la creación de 92 mil empleos a agosto 2020, después de haber perdido mas de 1 millón de empleos, por lo que la recuperación de empleos se ve lejana.

 

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